¡Ay horas tristes, cuán diferente estoy del que me vistes!
Ay, Amargas Soledades
Lope de Vega (1562-1635)
Mi vida se detuvo repentinamente. Seguí siendo capaz de respirar, comer, beber, dormir; en realidad, no podía dejar de hacerlo, pero, en mí, no latía la vida vedadera.
Mi Confesión. León Tolstoi (1828-1910)
Puede que me lleve mucho tiempo porque soy lenta, pero creo que, a pesar de todo, la vida aún tiene cosas para ofrecerme.
Entrevista con George Belmont
Marilyn Monroe (1926-1962)
domingo, 25 de marzo de 2012
Comentarios de personajes que sufrieron la tristeza
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario