La consideración oscurantista de los trastornos psiquiátricos lleva a planteamientos tan rotundamente inhumanos como los considerados en el famoso libro "Malleus Maleficarum":
"... pero aunque los locos mueran, se extingan, la locura sobrevive. Hay que destruir también la locura. ¿Cómo? Privándola de nombre, enmudeciéndola, privándola del derecho a la existencia. Esta es la función de las enfermedades mentales. Digámoslo de entrada: no existen las enfermedades mentales, únicamente existen las enfermedades sociales. La locura no es algo que le ocurre a un hombre, sino algo que sucede entre los hombres. Es decir, en la sociedad. Y que la psiquiatría ha inventado el concepto de enfermedad "mental" para encubrir esta verdad. Y que la psiquiatría, a su vez, fue inventada para servir al orden social interesado en tal descubrimiento: el orden burgués." Christian Delacampagne
"Un asilo. La palabra constituye un auténtico hallazgo. Sugiere la noción de refugio, de calma, de paz. Sin embargo, oculta algo muy distinto: ruido y furor, violencia aplastada con violencia, alienación, absurdo. Un asilo de alienados. ¿Quién son los alienados? ¿Acaso son seres humanos? No del todo: son locos. ¿Y qué es la locura? Una manera de ver el mundo. Una manera distinta de ver las mismas cosas. Una alergia a todo lo que es "normal". ¡Realmente intolerable! Es intolerable! Es intolerable decir que la vida es intolerable... Por ello se encierra, a quienes lo dicen: en un asilo. Por temor al contagio. Eso es." Christian Delacampagne
CONSIDERACIONES DE LA ANTIPSIQUIATRÍA
Vivimos en un momento de la historia donde el cambio es tan acelerado que empezamos a ver el presente cuando ya está desapareciendo. Ronald Laing
"Considero que la psiquiatría clínica en Occidente tiende a lo que un esquizofrénico amigo mío llamaba "torpeza social", mientras que la psiquiatría soviética parece ser un tanto torpe en la esfera de lo interpersonal. Aunque, a mi juicio, una biografía clínica debe concentrar la atención en la esfera interpersonal, y esto debe hacerse de tal manera que no se convierta en un sistema cerrado que excluya la pertinencia, en principio, de lo que uno puede colocar transitoriamente entre paréntesis por razones de conveniencia". Ronald D. Laing
Hacen falta muchos movimientos, como la antipsiquiatría para devolver a aquellas personas tildadas de "trastornos psiquiátricos" la dignididad. Es necesario que exista una gran revolución que hace años espera la asistencia psiquiátrica.
La psiquiatría del mañana, ojalá, será más eficaz, más racional, más humana, y prescindirá completamente del manicomio. En esta psiquiatría no cabrán posturas negadoras, ya que si la psiquiatría aspira a ser ciencia, no es posible que existan dos ciencias para una misma verdad.
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