Consiste en trabajar tanto con el niño como con el adulto.
Lo que ahora llamaríamos coterapeuta.
En el caso de un niño que robaba, Winnicott revela a la madre del joven ladrón por su comportamiento compulsivo:
"¿Por qué no decirle que usted sabe que cuando roba, él no necesita ni desea lo que roba, reclama a algo que no tiene derecho, a su padre y a su madre por los daños y perjuicios porque se siente privado de su amor?"
El terapeuta siempre tiene por objetivo no perturbar la relación del niño con sus padres, ni el uso que puede hacer por esto.
Es decir, cuando es confiable, el medio familiar sigue siendo el lugar privilegiado para el desarrollo del niño.
Cuando los niños están en una situación muy perturbada necesitan ayuda para un pasaje por la fase regresiva. La regresión implica que él sea aceptado en su propio hogar como un "caso especial", como un "niño enfermo que está necesitando autorización para enfermarse aún más".
Claude Geets: "Donald Winnicott"
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