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Paz y Ciencia

miércoles, 7 de enero de 2015

Karen Horney: La Naturaleza Humana


TRES CONCEPTOS DE MORALIDAD DE LA NATURALEZA HUMANA.
 
1.- Si el ser humano es por naturaleza pecador o se deja llevar por impulsos primitivos, la meta de la moralidad debe ser equivarlos, domesticarlos, sobreponerlos.
 
2.- Si existe algo inherentemente "bueno" en la naturaleza humana y algo inherentemente "malo", la meta de la normalidad debe ser asegurar la victoria final de lo bueno, mediante la supresión de lo malo y la orientación o el esfuerzo de los elementos buenos a través de la voluntad, la razón y la fortaleza.
 
3.- Si la naturaleza humana se vé como una evolución inevitable hacia la autorrealización por una tendencia instintiva, no por voluntad, entonces la meta de la moralidad es eliminar los obstáculos de esa evolución con el objeto de dar la máxima oportunidad para que se manifiesten las fuerzas espontáneas del crecimiento.
 
Horney rompió lazos con freud y postuló un paradigma psicoanálitico en el cual la cultura y las relaciones humanas anómalas reemplazaban a la biología como las causas más importantes del surgimiento de la neurosis.
 
En "Our Inner Conflicts" (1945) y Neurosis and Human Gowth (1950) sostuvo que los individuos, para defenderse de la amsiedad producida por los sentimientos de inseguridad, al falta de afecto y la falta de valoración, se privan de sus sentimientos reales y erigen elaboradas estrategias de defensa.
 
En la década de los 40, Horney desarrolló su teoría madura a lo que muchos vieron su contribución más importante  sostuvo que los individuos, para defenderse de la ansiedad producida por los sentimientos de inseguridad la falta de afecto y la falta de valoración se privan en sus sentimientos reales y exigen elaboradas estrategias de defensa.
En Our Inner Conflicts, Horney se centró en las defensas que consisten en acercarse, enfrentarse o alejarse de otras personas y en las soluciones neuróticas resultantes de conformidad, agresión y desapego. En "Neurosis and Human Growth" puso énfasis en las defensas intrapsíquicas y explica que la idealización d euno mismo impele a la búsqueda de gloria y a lo que ella le llamó sistema de orgullo, que consiste en orgullo neurótico, exigencias neuróticas, deberes tiránicos y odios hacia sí mismo. El alcance y poder de la teoría madura de Horney se ha manifestado no  únicamente en las aplicaciones clínicas de la teoría, sino también en los campos de la crítica literaria, la biografía y los estudios de cultura y género.
Para Horney la meta de la terapia es ayudar a la gente a que abandone sus defensas que la alienan de sus verdaderos deseos, gustos y aversiones, esperanzas, miedos y deseos, para que  entre en contacto con lo que ella llamó el real SELF.
 
Debido a su énfasis en la autorrealización como fuente de valores sanos y metas en la vida, Horney es una de las fundadoras de la Psicología Humanista.

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