Trauma Complejo o Acumulativo

El trauma complejo, el debido a un ambiente de crianza de negligencia y abandono por parte de las figuras cuidadoras signifivativas de la persona (Trauma acumulativo o Complejo), permanece almacenado en el aparato psíquico y en el sistema neurobiológico como un recuerdo implícito que puede experimentarse en cualquiera de sus componentes somatosensoriales: sensaciones somáticas (por ejemplo, colon irritable); imágenes, emociones, episodios disociativos y cogniciones dolorosas.
Estas personas pueden desarrollar problemas de personalidad, en concreto el trastorno borderline, existe un texto muy sugerente, de enfoque muy particular que aborda el yo disociado, el yo traumatizado, se titula: "El Yo Atormentado. La disociación estructural y el tratamiento de la traumatización crónica". Es de Onno van der Hart, Ellert R.S. Nijenhuis y Kathy Steele.

Cuando estas vivencias de origen se siguen reviviendo en el presente la persona se descoyunta. Los autores del libro hablan de unos niveles de integración según los cuales no todo el mundo llega a la disociación y la desintegración. Esto depende de lo mantenido de la situación, de cómo de intensa ha sido la situación y a qué edad, entre otras variables, comenzó la negligencia. Existen personas que se rehacen, allí está presente el concepto de resiliencia.
Ahora bien, las personas que han vivido este tipo de situaciones mantenidas a lo largo del tiempo y han contnuado hasta su vida adulta presentan generalmente problemas emocionales importantes.
Esto es distinto del trauma simple, por una causa puntual. Maticemos que este tipo último de traumas también dependen de la virulencia del acto en sí mismo, por ejemplo una virulencia o un intento de asesinato podría afectar gravemente a una persona.
Decía arriba que suele haber comorbilidad con otros trastornos, otras veces se presentan crisis depresivas graves, o se recurre a las drogas como automedicación, al alcohol. Siempre como una salida mágica del problema, una evasión, una manera de "olvidar" que puede, en el peor de los casos, convirtiéndose en un estilo de vida. Las personas tienen más capacidad de la que podamos imaginar para autodesarrollarse y organizarse pero también para autodestruirse, a veces, junto con la persona enferma puede "arrastrar" a familiares y otros seres queridos por el camino. La conducta errática es propia de estas personas y llega a destrozar su vida y la de la que los quieren.