La historia de los hombres

 

«—Después de ver a Dios se sintió muy bien, durante casi un año. Y luego cambió todo. Estuvo peor de lo que había estado en toda su vida, pues se dio cuenta de que jamás volvería a ver a Dios. Viviría el resto de su vida, décadas, quizá cincuenta años, y no vería otra cosa distinta a lo que siempre había visto. Lo que nosotros vemos. Se puso peor que si no hubiera visto a Dios. Me lo explicó un día que se encontraba muy mal. Perdió la cabeza y empezó a maldecir y a romper cosas que tenía en su piso, incluso el tocadiscos. Había comprendido que siempre viviría igual, sin ver nada, sin finalidad alguna. Un montón de carne en movimiento, comiendo, bebiendo, durmiendo, trabajando y cagando.» Philip K. Dick.

 

 

LA HISTORIA DE LOS HOMBRES ES UN INSTANTE ENTRE DOS PASOS DE UN CAMINANTE

 

El sabio chino Lao-tsé decía en el Tao Te Ching de mil millas empieza con un paso. Este aforismo tiene más de dos mil años, pero sigue siendo válido en los tiempos actuales, en los que muchas personas se ven obligadas a recomenzar debido a crisis económicas, sentimentales o existenciales.

 

Kafka se refería a cada historia personal como a un instante entre dos pasos, teniendo en cuenta todas las generaciones que nos han precedido y las que nos seguirán.

 

Sin embargo, en una misma existencia todo hombre o mujer puede vivir diferentes renacimientos, fracasar, empezar de nuevo, reinventarse. Mientras sigamos sobre la faz de la tierra, cualquier cosa puede ser proyectada, intentada, realizada.

 

Somos un instante entre dos pasos, pero ese instante contiene todas las posibilidades del mundo.

 

Como dice la sabiduría popular: "Todo está por hacer".

 

 

 

 

CUANDO TODO PARECE TERMINADO, SURGEN NUEVAS FUERZAS. ESTO SIGNIFICA QUE VIVES

 

 

La resiliencia es nuestra capacidad de superar cualquier adversidad y salir fortalecido de ella, algo que fue una constante en la vida de Kafka.

 

Otro judío, el francés Boris Cyrulnik, popularizó este término tras vivir en sus propias carnes el exterminio nazi. Sus padres fueron asesinados enuno de los campos del horror. Sin embargo, él consiguió en dos ocasiones evitar ser deportado, salvando así la vida, con solo seis años. Semejante trauma acabaría con la salud mental de la mayoría; sin embargo, Cyrulnik tuvo la suerte de ser acogido por personas que le inculcaron el amor por la vida y por los demás.

 

La clave de la resiliencia está en la curación a través del afecto. Boris Cyrulnik trabajó con los huérfanos rumanos tras la caída de Ceaucescu. Comprobó que los maltratos no eran la causa principal de los trastornos mentales, sino la falta de cariño y afecto en los orfanatos.

 

Actualmente no solo trabaja con niños, sino también con enfermos de Alzheimer. Estos pacientes puede que olviden su pasado, incluso las palabras, pero jamás olvidan el afecto o la belleza de la música, asegura Cyrulnik.

 

El afecto es la mejor herramienta y el bálsamo de nuestra vida, ya que permite que los seres humanos se comuniquen con respeto, cualquiera que sea el idioma que hablen o la cultura que tengan.

 

 

 

 

 

 

http://youtu.be/hWyZD0Xs2n4 Despierta, tiemblo al mirarte- Gustavo Adolfo Bécquer-

http://youtu.be/wQaZBQS7C_Y Amor eterno -Gustavo Adolfo Bécquer-

http://youtu.be/T_T3Hjdy39Y Volverán las oscuras golondrinas -Bécquer-

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