Trainspotting

En Edimburgo, Escocia, colonizado por el Imperio Británico, las almas de los protagonistas de esta película están conquistadas por la "no-vida", por la droga, por la muerte, por la desidia, el hurto, la cárcel y el SIDA. Un grupo de escoceses que tienen una considerable tendencia social, particularmente el "psicópata" "Begbie", que también apareció en "Full Monty". Él es un alcohólico, con gusto por la violencia, siempre armado con una navaja, le gusta generar controversias, peleas y acabar con las esperanzas de sus amigos, enganchados al "jaco", a la heroína. Un mundo aparte, de molicie y muerte en vida.
Una situación extrema lleva a ""Spud" a la cárcel y "Renton", Edward Mc Gregor, que se mete en la taza del water del peor baño de Escocia para encontrar unos supositorios de opio. Una película que mezcla la fantasía, lo onírico y la pesadilla. La crudeza de la adicción, de la desintoxicación y del síndrome de abstinencia, así como la despersonalización y síntomas desagradables que produce el abuso de esas sustancias. No se conforman con tomar la heroína, la acompañan de "barbitúricos" varios para soportar el dolor.
Finalmente "Renton", tras un "trapicheo" de los 4 protagonistas se escapa con el dinero y deja a "Spud" una cantidad en una caja de seguridad. Busca rehacer su vida, y tal vez para ello tenga que apartarse de ese entorno tóxico y psicópata, con la cruel anomia y desesperanza introducida en la vena. Trainspotting es una película, documental y trama inspirada en un libro de Irvine Welsh. Trainspotting es una película escocesa de 1996 dirigida por Danny Boyle y basada en la novela homónima escrita por Irvine Welsh. Trata de un grupo de heroinómanos de Edimburgo que no tienen aspiraciones en su paso por la vida.
Una obra de arte del cine británico emparentada con la legendaria "La Naranja Mecánica".
Hay que añadir que en determinados barrios de nuestras ciudades la situación no es muy distinta. Las unidades de toxicómanos, ahora reformuladas a Unidades de Trastornos de Personalidad saben muy bien que atmósfera de anomia y vida nihilista existe en estos lugares, donde el apoyo de la familia a veces está al margen y donde la situación socioeconómica, más en estos años, hace mella en la cotidianidad.