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Paz y Ciencia

sábado, 16 de junio de 2012

Aspectos sociales que facilitan la organización de los trastornos de personalidad

“El mal gusto es creativo. Es el dominio de la biología sobre la inteligencia.” Salvador Dalí.
“Aún durante siglos, será surrealista en arte todo lo que apunte a una mayor emancipación del espíritu” André Breton.
“No puede haber una revolución total sino una revolución permanente. Como el amor, es el goce fundamental de la vida Max Ernst.
“El genio no puede ser juzgado más que por el genio” Giorgio De Chirico.
“Nosotros los metafísicos hemos santificado la realidad” Giorgio De Chirico.
“Nunca sueño cuando duermo si no cuando estoy despierto” Joan Miró.
“Nunca adaptes el vestido al cuerpo; enseña al cuerpo a adaptarse al vestido” Elsa Schiaparelli.

Aspectos Sociológicos que se vinculan con la génesis de problemas en la organización de la personalidad.

No es causal que en el momento presente cobre tanto preocupación en nosotros el predominio de personas que expresan sus conflictos a través de estas formas denominadas trastornos de personalidad. Pensamos que este predominio está alimentado, por las dinámicas que rigen actualmente el funcionamiento del grupo grande social, y que este tipo de personalidades son propias de dicho grupo. Vivimos en una sociedad narcisista, como han dicho Erich Fromm, Alexander Lowen, o, por citar a alguien moderno el personólogo ilustre Theodore Millon, entre otros.
Dichos modelos están basados en una serie de principios elementales en los que se asienta nuestra cultura, y por lo tanto a los que se les rinde culto, veneración y acatamiento.
Son principios que alimentan el narcisismo y la omnipotencia a través de la búsqueda del placer y del poder representado en sus elementos simbólicos como son el dinero, el acceso a cargos de influencia, etc. El poder y estos medios de ejercerlo se usan cada vez más en nuestra cultura para el control y el sometimiento de los otros y no como un medio para resolver las necesidades básicas de los seres humanos. La industria de la psiquiatría y su hermana, la industria farmacéutica, con el Prozac para los remedios del alma "cosifican" la naturaleza humana explicando que se debe a "desequilibrios en la serotonina en las hendiduras sinápticas". Puede sonar seductor pero es una completa estupidez, un invento antihumanista para vender pastillas y para simplificar las cosas hasta el extremo de lo que diría Sartre: "El ser y la nada". La nada es lo que representa ese modelo de pensamiento psiquiátrico, farmacéutico, con la quimera que se puede explicar así: depresión=falta de serotonina=tratamiento ISRS; dolor de cabeza=falta de paracetamol=tratamiento Gelocatil.
Otros de los principios radica en el signifcado y uso de la dimensión del tiempo. La inmediatez, la solución rápida (frecuentemente en formas de actuación) de cualquier tipo de conflicto, generan una dificultad para admitir el pasaje por el tiempo como  un puente entre el pasado y lo desconocido, como una dimensión de límite y a la vez de esperanza.
Lo cronológico no se contempla para apreciar los cambios, la evolución y desarrollar la capacidad de espera. Más bien es el "aquí y ahora" lo que se impone (con actitudes impositivas) a la búsqueda sin más de resultados que den respuesta a la eficacia, y rentabilidad del tiempo.
Estos principios nos llevan a entender la búsqueda fácil y rápida del poder y del dinero, pues desde ahí se intenta realizar un control ominpotente también sobre el tiempo, negándolo. De esta manera se impide la capacidad de relativizar y de despegarse de lo concreto, que funciona como un imán para impedir ver con distancia y abstracción los episodios de la vida, y encontrarles un sentido dentro de un proceso entre un antes y un después. Desde esta dimensión, los síntomas, que revelan expresiones de la dificultad de vivir, son concretizados de tal manera que pasan de ser un aspecto parcial dentro de un desarrollo, a un aspecto total con un sentido en sí mismo y separado de unas raíces más profundas, en un claro funcionamiento disociado. Las clasificaciones diagnósticas, servidas a través del DSM están surtidas de estos funcionamientos.La aparición de estos modelos es fruto de modelos sociales imperantes.
Esta utilización que nuestra socieda actual hace del tiempo lleva implicito el frecuente rechazo que se hace de la historia.
La historia como una serie de experiencias precursoras y aclaradoras de los momentos presentes, es incómoda pues nos hace responsables de lo vivido, y de cómo lo vivido condiciona nuestro acercamiento a lo desconocido. Si se diese un sentido importante a la historia, el control omnipotente que se quiere imponer, a través de los cambios que se intentan diseñar desde el poder, se vería muy limitado, pues los cambios humanos se realizan muy lentamente y no están sometidos a diseños artificiales, que llenan de temores e inseguridades a las personas al crearse una cultura dependeinte. Pero dependiente no de la historia, sino del diseño e intereses organizados desde los funcionamientos omnipotentes de los grupos de poder, por eso la historia es negada. Además se vive como una vuelta atrás infructuosa, pues desde el sentido práctico actual, ya no tiene remedio, "lo pasado pasado está" y además es desagradable pues la historia habitualmente es el comendio de los acontecimientos que hacen referencia a las pérdidas en la vida.
Esta negación de la historia para evitar el encuentro con las pérdidas y el sufrimiento, además de las necesidades de control omnipotente del tiempo, y de los seres humanos va organizando una cultura donde la existencia del dolor y el sufrimiento se rechazan como experiencia consustancial con el género humano, "el dolor es inhumano".
Para poder sobrevivir en estos modelos culturales se construyen dinámicas de funcionamiento "como-si", donde lo superficial, el enmascaramiento de lo profundo, evitan la conexión con los aspectos auténticos de las personas, con las necesidades básicas de los seres humanos. Esta ausencia de consideración hacia las necesidades básicas (necesidades existenciales) puebla el mundo relacional de las pulsiones que reclaman una rápida satisfacción, para negar el conocimiento de dichas necesidades y transforma a las personas en personajes, sin historia, y viviendo la vida diseñada por otros.
Todos estos modelos culturales sostienen y facilitan el desarrollo de dinámicas relacionales que propician la organización de personalidades en las que predomina el narcisismo, y la omnipotencia, la ausencia de límites, las soluciones y respuestas en el aquí y ahora, la inmediatez, la dificultad de la espera, la negación de las pérdidas, y el dolor, el funcionamiento "como-si" transformándolos en personajes a partir del rechazo que esta sociedad actual realiza sobre las necesidades emocionales básicas de los seres humanos.

Vy VI Encuentro de Psicoterapia Anallítica de Bilbao. GPAB: Sueños y Trastornos de Personalidad.
http://youtu.be/Y2kctftTq_Q The Beatles (1965) -Yesterday-
http://youtu.be/Ok9z1h3vhPM The Beatles -Let is Be" Ambas subtituladas al español. Un sabio consejo: Deja que sea...Déjate ser...


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