Conceptos winnicottianos II

La madre suficientemente buena es aquella que tiene un adecuado sostén, handling o manejo y presentación de objetos. Esto significa que el bebé se siente seguro en los brazos de su madre y que esas experiencias en las que ella no está puede recurrir a objetos transicionales, que como su nombre indica son transición potencial entre lo que está y no está, entre el yo y el no-yo. La manta o el osito como objetos que representan a la madre, sin ser objetos sustitutivos o fetiches.
También la madre maneja a su hijo con dulzura y le proporciona una atmósfera confiable en la que él siente que su madre no falla más de lo necesario para un crecimiento. Porque a partir de las fallas maternas también se crece, como las fallas del analista, que diría Winnicott que sirven para crecer. Él decía que interpretaba para que el paciente supiera hasta que punto llegaba los límites de su conocimiento sobre el paciente. ´
Estos tres pivotes: sostén, handling y presentación de objetos, esta última relacionada con presentar la realidad en pequeñas dosis y proteger de una estimulación excesiva con la función materna de "barrera antiestímulos" del bebé. Las tres conjuntamente ayudan a la integración de la psique del bebé, a una cohesión, a un transcurrir entre la integración y la no integración sana. La no integración son esos momentos en los que el bebé se siente solo pero sostenido metafóricamente por su madre, protegido y seguro, sabe que recibe caricias y alimento, que le están ayudando a descubrir el mundo. El primer sorbo de realidad decía Piera Aulagnier sobre la primera mamada ("La violencia de la interpretación).
La desintegración viene más tarde cuando el bebé ya adulto regrede a un estado anterior de desamparo en el que previamente las fallas de la madre han sido excesivas por lo que Winnicott llamaba una "madre loca". Las quiebras en la trayectoria vital, en la continuidad existencial se plasman en la vida del niño interno del adulto que pierde el contacto con la realidad, sería el ejemplo extremo de un maternaje con demasiadas fallas. Si la madre está muy pendiente del hijo, quizá obturando la espontaneidad del bebé se va construyendo un falso self, esto es una personalidad por reactividad a las imposiciones del mundo externo que representa la madre. El verdadero self sería aquel que permite crear lo dado, da acceso a la creatividad con el balance sano del falso self que ayuda a que el adulto se adapte a las convenciones y normas sociales. Pero Winnicott también decía "en verdad que pobres somos si solo estamos cuerdos", lo que resulta una invitación a la espontaneidad más vívida para poder dejar y liberar a la mismidad de sus potenciales de salud, a una locura sana donde lo lúdico, el jugar y el compartir un espacio de atmósfera confiable que antes ha disfrutado como bebé le permite acceder al mundo externo de forma que no sufre de inhibiciones o de un superyó sádico. Frente a Melanie Klein, Winnicott consideraba que ese falso self, relacionado con el superyó sádico deviene por fallas maternas, Klein, sin embargo, opina que el bebé tiene un Edipo temprano donde la culpa, el incesto y la angustia están presentes, que la moralidad del bebé es mucho más poderosa de lo que podemos imaginar.
Winnicott analizó al hijo de Melanie pero ella, con un carácter fuerte y algo intrusivo quiso supervisar el trabajo clínico de Winnicott, él se negó. Son algunas de las cuestiones que le llevaron a Winnicott a crear el Middle Group o Grupo Intermedio, donde hablaba de "lenguaje muerto" en relación a la doctrina kleiniana que imperaba en la Sociedad Británica de Psicoanálisis y que sólo se comunicaba con los vocablos kleinianos. Él decía "por favor, que esté vivo cuando muera", es decir que su legado permitiera seguir creando, inventando, innnovando y ajustándose a la experiencia del psicoanalista con sus pacientes, adaptando la teoría en función de cada consultante sin diagnosticar necesariamente ni imponer tesis psicoanalíticas.
También decía que cuantas veces había demorado la evolución de un paciente por haber interpretado prematuramente sin dejar que éste hiciera el insight de forma autónoma.
Leer a Winnicott es leer otra forma de psicoanálisis y psicoterapia.