PEACE

PEACE
Paz y Ciencia

martes, 14 de mayo de 2013

Contacto-Retirada


 

EL CONTACTO

El contacto es una principales necesidades psicológicas del ser humano. Sin él, la persona se ve sometida a marcados desajustes de la personalidad y, en casos extremos, a la muerte.

En el vientre materno tuvimos todo lo necesario, al nacer pasamos a una etapa de dependencia absoluta y posteriormente a otra de dependencia relativa. El objetivo es la individualización. En palabras de Carl R. Rogers: “El Proceso de Convertirse en Persona”, célebre texto de la psicoterapia humanista.

A través del contacto, cada ser humano tiene la posibilidad de encontrarse en forma nutricia con el mundo exterior, realizando una incorporación o intercambio de alimentos, afectos, etc. Este intercambio se lleva a cabo a través de esta síntesis entre la unión y la separación que es el contacto.

Continuamente el ser humano se conecta y desconecta del medio. El encuentro, que puede darse en un momento, acaba inmediatamente para ser sustituido por el retiro, de forma más o menos voluntaria, ya que lo podemos llevar a cabo nosotros o los demás. En este período de contacto nos tocamos, hablamos, escuchamos, sonreímos, nos conocemos, nos amamos, etc. Pero también cuando me desconecto estoy solo. Puedo conservar tu recuerdo, como mecanismo para no sentirme así; sin embargo, cuando retiro el contacto me quedo solo. El ritmo contacto-retirada es necesario para el buen funcionamiento del organismo.

Cada persona tiene su espacio vital dentro del cual, y dependiendo del momento, puede recibir o abrirse a determinadas personas; pero nadie debe invadir su espacio. Si esto ocurre nos sentimos amenazados en nuestra integridad e individualidad.

El espacio vital es un concepto psicofisiológico, un espacio territorial imaginario que nos sirve para definir la cantidad de contacto, la calidad, el tiempo de duración de ese contacto y la proximidad que cada cual necesita para sentirse seguro sin correr el peligro de sentirse invadido por el otro o los otros. El exceso de retirada, la amplitud del espacio vital puede reducir el contacto con los demás. Esta reducción conduce a la persona a la soledad. La mayoría de las veces se produce por miedo, aunque el deseo de contacto sea grande.

<<El contacto empieza a funcionar cuando se encuentra el sí mismo con que le es ajeno>> Perls (1976)

 

Schnake (1995) dice: <> Este es uno de los orígenes de la hipocondría, incorporar simbólicamente a alguien y mantenerlo dentro como una forma de controlarlo o de no perderlo, no dejándolo ir, si es una persona que ya falleció>>

El contacto con uno mismo se deriva de la capacidad que tiene el ser humano de desdoblarse, de convertirse en observador y observado, de la forma más objetiva posible (la objetividad absoluta no existe, ni siquiera con aquellas cosas por las que no nos sentimos afectados emocionalmente). La posibilidad de emplear esta capacidad del ser humano, como lo es la dicotomía a favor del crecimiento, es una característica del auto-examen.
Rodrigo Córdoba Sanz, Psicólogo y Psicoterapeuta. Zaragoza. rcordobasanz@gmail.com

No hay comentarios: