jueves, 9 de abril de 2009
Spinoza, Fromm, Albiac. Juntos en la cama.
He vuelto a entrar en el mundo de Erich Fromm, tras terminar ayer "Ética y Psicoanálisis" ahora estoy releyendo "El miedo a la Libertad". Fromm trata de poner el acento en lo social construyendo una psicología social y enriquecer la sociología. Para decirles la verdad la idea de leer a Fromm vino dado por Albiac, filósofo español, prodigio del malabarismo intelectual y dado a escribir libros con un humor poco dado al marketing. Albiac (Catedrático de la UCM) participaba en una presentación de uno de sus libros -Libro Contra los Políticos- en la cadena de Libertad Digital, el buen hombre, como Don Federico Jiménez Losantos (este último exBandera Roja y exmiembro del grupo artístico Trama -también llamado grupo Pirineos-, entre otras referencias) se las gasta con acritud en lo concerniente a la política habiendo cambiado su discurso. "Greatest Hits de Albiac: Gabriel Albiac hablando del Plan bolonia: "Los pedagogos deberían estar en España fuera de la Ley por la masacre realizada...El plan Bolonia es una extensión del parvulario."
Albiac hablaba de Spinoza y esto me hizo pensar en Erich Fromm, otro buen amigo de Spinoza, del último:
Deus, vive Substancia, sive Natura, la famosa fórmula de Spinoza expresa una noción de Dios diferente al de la Escolástica e incluso a la de Descartes. Dios es la Naturaleza, la Naturaleza es un Todo, una sola Substancia. Las cosas no son sino partes "inmanentes" del Todo.
De esta forma, la Substancia (o Naturaleza) es activa y creadora. El atributo (o lo que expresa la esencia de la sustancia) del pensamiento genera ideas encadenadas entre sí que sintetizan una única idea de Dios. Y el atributo de extensión, produce una serie también infinita de movimientos: El orden y conexión de las ideas es el mismo que el orden y la conexión de las cosas.
Tratado teológico-político (fragmento):
" Quizá alguien piense, sin embargo, que de este modo convertimos a los súbditos en esclavos, por creer que es esclavo quien obra por una orden, y libre quien vive a su antojo. Pero esto está muy lejos de ser verdad, ya que, en realidad, quien es llevado por sus apetitos y es incapaz de ver ni hacer nada que le sea útil, es esclavo al máximo; y sólo es libre aquel que vive con sinceridad bajo la sola guía de la razón. La acción realizada por un mandato, es decir; la obediencia suprime de algún modo la libertad; pero no es la obediencia, sino el fin de la acción, lo que hace a uno esclavo. Si el fin de la acción no es la utilidad del mismo agente, sino del que manda, entonces el agente es esclavo e inútil para sí. "
Erich Fromm explica la diferencia entre la Ética Humanista y la Ética autoritaria, con algunos retazos del Mein Kampf de Hitler ilustra como la Ética Autoritaria implica el rendirse a una autoridad y asumir con pasividad los preceptos de un agente externo que es investido de poder, en este recorrido se pierde la identidad, y esto último es uno de sus objetivos, recorrer un tratado de caracterología entendido dentro del contexto del hombre como animal social. En varias notas al pie nos indica que su pensamiento se inclina hacia las ideas de Karen Horney y Harry Stack Sullivan. Por lo que se sabe neopsicoanalista, postfreudiano y además en su obra critica las ideas del psicoanálisis en lo que tiene que ver con lo social, diciendo que dichas aproximaciones han sido torpes, recordemos la obra "Totem y Tabú" de Freud o el "Porvenir de una Ilusión".
Fromm nos anima a situarnos en la orientación productiva y esto, de forma básica, supone vivirse como agentes activos del cambio interno y externo, pensarnos y sentirnos como seres capaces de la construcción del intorno y el entorno, así como cuestionar aquellos que lideran las clases y ser autogobernados.
Existe una anécdota curiosa sobre el libro "El miedo a la libertad", cuestión que también se dirime en "Ética y Psicoanálisis", se trata del momento en el que Fromm, estudioso de Hitler por la Ética Autoritaria, nos explica que el mismo Hitler escribía en su famoso libro prohibido que sus discursos y arengas los daba por la noche porque era cuando el pueblo, ya cansado, podía más fácilmente rendirse al poder de la autoridad y sucumbir a sus mandatos e ideas. Esta anécdota fue lo que me hizo investigar este libro. Un saludo, Rodrigo Córdoba Sanz.
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1 comentario:
El Profesor Gabriel Albiac, Hombre Cultísimo, y Buena Persona (no forma parte de Tribunales de Oposiciones a Cátedras, renuncia a ello, según dijo en antena)
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