PEACE

PEACE
Paz y Ciencia

jueves, 18 de septiembre de 2008

¡Qué es eso de la Psicoterapia Dinámica?


¿Qué es eso de la Psicoterapia Dinámica?

Podemos definir de muchas formas esta modalidad asistencial y paradigma de pensamiento para entender la clínica en salud mental.
La psicoterapia dinámica nace del psicoanálisis, sin embargo se ha ido enriqueciendo de otros pensadores y de los avances de las neurociencias y sus alcances empíricos.
Dentro de la psicoterapia dinámica existen muchas influencias, desde el cognitivismo hasta el psicoanálisis, pasando por la gestalt, el análisis existencial, las psicoterapias breves y otros.
Es una forma de intervención basada en un vínculo terapéutico, a diferencia de modelos psicológicos que nacen y mueren en la Universidad, no son directivos, esto es, no se basan en consejos y pautas de conducta, por ejemplo, la modificación de conducta con representantes más destacados Skynner y Watson.
¿Por qué? Recordemos el grabado de Goya: “Bellos Consejos”, de la serie “Los Caprichos”.
Elaboremos la respuesta. Las psicoterapias dinámicas, hablo en plural porque no se trata de una sola forma de psicoterapia sino de un natural enlace entre dos participantes que modela un encuentro genuino que consiste en transformar la forma de construir la realidad de uno, el que pide ayuda a través del método (camino) que brinda el terapeuta, una guía de búsqueda, sostén emocional, apoyo y ayuda. Estas dos últimas palabras son lo que significa terapia en su sentido etimológico.
¿Por qué no se dan consejos explícitos?
Porque el objetivo no es la dependencia sino la autonomía del individuo que solicita ayuda. Dicha persona puede sufrir síntomas, no encontrar un sentido a lo que le rodea, no encontrarse satisfecho consigo mismo o quizá tener dudas con respecto a su papel en el mundo. No podemos ser nosotros quienes clasifiquemos y valoremos a nivel cuantitativo y cualitativo su percepción de dolor aunque existan trabajados, fiables y validados instrumentos para evaluar dichas dimensiones. En realidad, si se puede…
Si no se dan sistemáticamente consejos explícitos es porque se busca un cambio estructural, una modelación en el fondo de la persona, esto es, en su forma de relacionarse con el otro, en la forma de sentir, en la manera de valorarse (identidad, autoconcepto, autoestima), también en las formas de pensar y tamizar la realidad, sus pretextos, prejuicios, religiones privadas. Su mundo interno queda abierto en el espacio terapéutico de la psicoterapia dinámica y esto es lo distintivo de la psicoterapia dinámica. En esta forma de trabajo en psicoterapia lo importante es el sujeto en cuanto pensante y deseante, también importa los síntomas que porta a la consulta pero los síntomas son entendidos como emergentes de un malestar previo, como significantes. Esto ha sido demonizado hablando de determinismo psicológico, y muchas veces con argumentos correctos debido a la obstinación de los más puristas psicoanalistas, por ello, mantener una postura abierta a otras formas de entender la realidad, tanto la clínica como la técnica es la praxis más operativa y coherente con lo que procuramos proponer al consultante. Por tanto, hay también alguna forma de consejo aunque planteado como propuesta.
Las psicoterapias dinámicas consideran que el cambio se produce a través de un vínculo con el terapeuta, en el desarrollo y análisis de la transferencia, que nos abrirá las puertas a lo inconsciente. Esto último, es todavía para algunos sospechoso como lo fue en su día Copérnico o Darwin, los neurólogos saben que no procesamos toda la información de manera consciente y los congnitivistas emplean la expresión “pensamiento automático”.
En definitiva, sin ánimo de hacer algo imposible como concluir un tema que sólo puede ser VIVIDO en un proceso terapéutico, comentar que las psicoterapias dinámicas ofrecen un marco de confianza para que el paciente pueda ir elaborando sus conflictos con el “intorno” y el entorno. En dicho proceso la personalidad del consultante se desplega con toda su belleza ofreciendo a este trabajo una estimulante fuente de información para aprehender la estructura de personalidad de dicha persona, la “arquitectura sentimental” del sujeto, la “gramática de su fantasía”, sus deseos, sus anhelos, sus motivaciones y poder construir, reconstuir y deconstuir los moldes que le hacen sufrir. Por tanto en dichas psicoterapias, el terapeuta es activo pero también lo debe ser el paciente. Tanto o más.
Mencionar aquí la teoría de Jacques Lacan del SsS (Sujeto Supuesto Saber), que a nivel básico explica que el paciente acude a la clínica pensando que el terapeuta va a saber más del paciente que el propio paciente. Por mucho que se quieran empeñar en lo contrario, en el fondo, el que mejor sabe lo que le pasa es el consultante y necesita una ayuda a través de un delicado marco de trabajo para resignificar algo tan fino como es el mundo interno. La “cosa en sí” no se puede describir ni explicar en este breve escrito, por ello les aconsejo que no duden en pedir ayuda porque es un proceso de enriquecimiento que va ligado a la salud, a la creatividad y a la Vida auténtica.
Si tienen alguna duda, no duden en preguntar.

Rodrigo Córdoba Sanz, 18 de Septiembre de 2008.

3 comentarios:

Anónimo dijo...

Considero que tu blog es muy interesante y gracias por compartirlo, ya que es una buena fuente para futuros psicologos como yo XD

Unknown dijo...

Me ha gustado. es esclarecedor para algo que a mí me resultaba un poco vago. he tenido contacto con este tipo de terapia y sí, se basa en la relación y en la autonomía del paciente. Para mí han sido unos encuentros en los que he crecido.

Anónimo dijo...

hola quisiera saber que tipos de contribuciones ha hecho el análisis existencial a la psicoterapia dinámica?