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Paz y Ciencia

sábado, 18 de diciembre de 2010

Un despertar precoz

He recibido esta postal por algún libro que he encargado a Uruguay, un trabajo de Adriana Anfusso y Verónica Indart junto con colaboradores de peso, el libro se llama "¿De qué hablamos cuando hablamos de Winnicott?", la verdad es que la espera mereció la pena, fue hermoso tomar contacto con esa lectura llena de enclaves y fragmentos inolvidables que hicieron de su lectura algo muy hermoso, a partir de allí tomé cierto contacto con Adriana Anfusso que se dirigió a mí para preguntarme que, desde España, como había conseguido el libro. Compré dos ejemplares y uno lo regalé a un amigo psicoanalista que está trabajando con cariño sobre Winnicott, se llama Javier Lacruz y pueden ver parte de su trabajo (inacabado) en http://www.elgestoespontaneo.com/ Es algo común que entre los miembros del equipo multidisciplinar del equipo nos regalemos libros para el cumpleaños, yo no suelo regalar el mismo día del cumpleaños, lo hago cuando tengo un hallazgo particular como éste. Recuerdo que a otra compañera que está caminando por los derroteros del psicoanálisis ortodoxo le regalara con un poco de sorna el libro de Thomas Szasz, "El Mito de la Enfermedad Mental".
Un libro que habla de la histeria como patología de la comunicación y como palabra a cambiar, ahora se llama personalidad histriónica y trastorno somatomorfo, estos conceptos lo engloban en mayor o menor medida.
A estas alturas del año, cuando se agolpan los pacientes que quieres solucionar sus problemas, otros que entran en crisis y quieren soluciones rápidas o los adolescentes que han recibido sus notas, por citar unos ejemplos me encuentro enérgico. Hoy me he levantado a las 4:30 AM, parece que un insomnio pertinaz me está molestando en estos últimos días del año, que por otro lado, encaro con optimismo e ilusión.
Creo que volveré un ratito a la cama para poder hacer el día más largo y con más energía, no sé que me ha llevado a levantarme tan pronto, tal vez las quejas de mi mujer por mis ronquidos me ha despertado, podría ser...
En fin, como la escritura y la elaboración de ideas para mí es un lenitivo práctico y creativo creo que podré acostarme de nuevo sin necesidad de ponerme hasta las "trancas" de café para sobrevivir el día.
Tengo quehaceres a lo largo de la jornada y ciertas obligaciones que no puedo dejar pasar, sólo quiero transmitirles que la pasión por este trabajo es tal que se ha visto reflejado en las entradas a este blog, cuando empecé apenas tenía 100-150, hace 2 años, ahora hay días que entran más de 900 personas, aunque hay que decir que en estas fechas disminuye el número de lectores que están centrados en hacer los regalos de navidad, pasear con sus niños, aquí hace un frío horrible, o cualquier otra actividad más lúdica.

El balance del año es sastisfactorio y me gustaría seguir haciendo esos descubrimientos librescos y tener alguna idea más fresca, pero tal vez me tuviese que tomar un café (más) y sentarme más solemne en el sillón del despacho. ¡Buenos días, feliz navidad y próspero año nuevo!

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